La situación actual con el alto nivel de fracaso y abandono escolar de nuestros alumnos hace urgente tomar medidas efectivas para paliar esta lacra. Por ello, la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE) acoge esperanzada las propuestas del titular de Educación de acometer de inmediato las necesarias reformas y, respondiendo a la oferta de diálogo, se ofrece para colaborar conjuntamente con el Ministerio y con la comunidad educativa en aras a alcanzar la excelencia educativa que nuestra sociedad demanda y necesita.
Así mismo, considera muy oportuna la sustitución de Educación para la Ciudadanía por Educación Cívico y Social. Es ésta una de las viejas reivindicaciones de CECE por considerar que se trata de una materia con gran carga ideológica y que supone una intromisión en el derecho que asiste a los padres de educar a sus hijos conforme a sus convicciones filosóficas, religiosas y morales.
En cuanto al bachillerato, CECE cree que un bachillerato de tres años puede ocasionar en los centros importantes problemas organizativos. Por este motivo, considera muy adecuado que el primer curso sea obligatorio y de transición y propone abordar esta reforma manteniendo las variables organizativas y económicas actuales: conciertos, profesores, espacios, edad de escolarización, etc…
En cuanto a la Formación Profesional, nos parece importante ligar esta etapa educativa al mundo laboral y, por consiguiente, a la empleabilidad. Nuestra recomendación es aprovechar el trabajo hasta ahora realizado e impulsar su culminación para que, cuanto antes, haya una oferta de formación eficaz en todos los sectores productivos.
Compartimos la apuesta de: introducir la cultura de la evaluación; aumentar la autonomía de los centros; impulsar el bilingüismo a temprana edad; motivar al profesorado como agente fundamental del proceso educativo; fomentar la cultura del esfuerzo, unificar la normativa de las comunidades autónomas y establecer unas enseñanzas comunes; favorecer la relación familia-escuela; garantizar la libre elección de centro y avalar la libertad de enseñanza como factor de calidad.
CECE apoya también otras propuestas formuladas por Wert, tales como la diferenciación curricular, la profesionalización de la gestión y la elaboración del estatuto docente. Estamos convencidos de que mantener el diálogo con los agentes sociales contribuirá positivamente a alcanzar los objetivos propuestos.